El
transbordador espacial o
lanzadera espacial (en
inglés Space Shuttle) de la
NASA, llamado oficialmente
Space Transportation System(STS), traducido "Sistema de Transporte Espacial", fue el único vehículo espacial utilizado para el transporte de astronautas por parte de
Estados Unidos. En particular lo destacable de él es que era parcialmente reutilizable.
Desde el despegue de la primera misión del transbordador espacial (
STS-1) se ha utilizado para el transporte de grandes cargas hacia varias órbitas, para el abastecimiento y colocación de módulos orbítales en la
Estación Espacial Internacional (ISS) y para realizar misiones del mantenimiento (como por ejemplo en el
Telescopio espacial Hubble). Visto de antemano, uno de sus aprovechamientos originales y que todavía no se ha aprovechado, es la posibilidad de traer de nuevo a la Tierra satélites en su bodega para ser reparados. Aunque desde la ISS en ella si se han traído grandes cargas, ya que las
Soyuz no puede traerlas de regreso por tener una capacidad más limitada.
El vehículo estaba programado inicialmente para realizar aproximadamente 100 vuelos.
El programa del transbordador espacial comenzó a finales de los años 60 y se convierte en prioridad principal de la NASA en los 70. En enero de
1986, un impactante accidente del
Challenger en el que murieron sus siete tripulantes, detuvo dos años el programa de lanzamientos. Igualmente, tras el desastre del
Columbia en
2003, no hubo más vuelos en los siguientes dos años. En enero de
2004 la NASA anunció que retirará la flota entera de transbordadores y los sustituirá en
2010. El regreso de los vuelos con la misión
STS-114 fue programado inicialmente en julio de
2005, pero debido a problemas en un sensor del tanque externo se descartó. Después de más de dos años de suspensión, el
26 de julio de
2005 el
Discovery reanudó las operaciones con la Estación Espacial Internacional (ISS) para la transferencia de material y abastecimiento. En la
reentrada a la Tierra hubo problemas técnicos con el seguimiento de la nave a causa del mal tiempo sucedido el
9 de agosto.
Puesto que en una sola misión el orbitador no puede compaginar el transporte de módulos a la ISS y continuar el mantenimiento del telescopio espacial Hubble, y de previamente haber cancelado estas misiones, la NASA anunció que realizaría una misión, la cúal fue la última realizada al telescopio Hubble, el 11 de mayo del 2009.
Según el discurso que sostuvo el presidente estadounidense
George W. Bush el
14 de enero de 2004, el uso del transbordador espacial será concentrado totalmente en el ensamblaje de la ISS hasta 2010, año en el cual tendría que ser substituido por el vehículo
Orión, todavía en fase de desarrollo.
Conclusión
El transbordador ha requerido de importantes avances tecnológicos para su desarrollo, incluyendo miles de
losetas de protección térmica, capaces de resistir el calor de la reentrada en el curso de varias misiones, además de sofisticados motores que pudieran ser usados una y otra vez sin ser desechados. El orbitador con forma de avión tiene tres de estos motores principales, los cuales queman
hidrógeno y
oxígeno líquido que están almacenados en el tanque externo. Fijados al tanque externo se encuentran dos cohetes de combustible sólido ó aceleradores llamados SRB, en inglés Solid Rocket Boosters, los cuales proveen la mayor parte del empuje durante el despegue. Los “boosters” se apagan y son arrojados al océano para ser recuperados, rellenados y preparados para el próximo uso. Una vez que los cohetes de combustible sólido han sido desechados, los tres motores principales del orbitador siguen quemando el combustible del tanque externo hasta aproximadamente los ocho minutos de vuelo.
El STS introdujo muchas herramientas que son utilizadas en el espacio: el sistema de manipulación remota, un brazo de 15,24 metros de longitud construido por la
Agencia Espacial Canadiense, es capaz de mover grandes y pesados objetos desde y hacia la bodega de carga del transbordador, la cual mide unos 18,29 metros de largo. El módulo
Spacelabconstruido por la
Agencia Espacial Europea (ESA), provee un laboratorio presurizado y completamente equipado para que los científicos puedan realizar diversos experimentos, cubriendo un amplio espectro de la investigación: desde la
astronomía, la creación de nuevos materiales, la observación de la
Tierra, el estudio de fenómenos físicos y hasta la investigación
biomédica. La Unidad de Vuelo Maniobrable (MMU) permite a los astronautas moverse libremente en el espacio sin estar conectado al Transbordador valiéndose de unos pequeños cohetes fijados a la estructura en forma de silla para el desplazamiento.
La mayoría de las misiones han sido científicas y de defensa. Entre los proyectos científicos más importantes se destaca la puesta en órbita del
Telescopio Espacial Hubble, la nave espacial
Galileo que realizó importantes descubrimientos, el Observatorio de Rayos Gamma y el transporte de módulos y abastecimiento para la construcción de la
Estación Espacial Internacional (ISS).